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una oración por el perdón de los pecados y el arrepentimiento la Biblia dice en primera de Juan 5 versículo 4 que todo aquel que es nacido de Dios no peca, pero el que es engendrado de Dios se guarda a sí mismo y el maligno no le toca efectivamente de esa afirmación podemos deducir la fragilidad y debilidad de un hombre cuando se trata de vivir una vida de absoluta santidad todo aquel que nace de mujer es un pecador el pecado es un rasgo inherente de hecho alguien dijo correctamente que no somos pecadores porque estamos pecando, estamos pecando porque somos pecadores el perdón por lo tanto se convierte en el sistema efectivo de Dios para traer al hombre de vuelta a sí mismo en todo momento si el perdón se arranca de nuestra caminata con Dios entonces todo hombre estará destinado al infierno lamentaciones 3 versículo 22 al 23 son las misericordias del Señor que no hemos sido consumidos porque sus misericordias no fallan son nuevas cada mañana grande es tu fidelidad sin embargo, lo que garantiza que un hombre será el receptor del perdón divino es el arrepentimiento genuino
