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Un contrato de arrendamiento de condominio es un documento legal firmado entre el propietario de una unidad de condominio y un inquilino que desea alquilar el espacio. Los inquilinos deben adherirse a las reglas y regulaciones de la asociación de condominios mientras disfrutan del acceso a las áreas comunes y privilegios comunitarios, a menos que se especifique lo contrario en el contrato de arrendamiento. Los derechos de los propietarios e inquilinos en un condominio son equivalentes a los de otros contratos de arrendamiento residencial. Un condominio consiste en unidades individuales que comparten derechos a instalaciones comunes, que se encuentran típicamente en edificios residenciales de gran altura. Los propietarios pagan cuotas de asociación para el mantenimiento de la propiedad y los costos operativos. Una vez firmado, el contrato de arrendamiento se convierte en vinculante para ambas partes.